
El enfoque de coaching en el campo de la gestión del desempeño organizacional fue tomado del contexto de los equipos deportivos ganadores, cuyos coaches se han caracterizado por manejar un estilo de liderazgo orientado a mejorar el desempeño individual y del equipo, a partir de una visión que todos comparten. Este estilo de liderazgo centrado en que se hagan bien las cosas, ha trascendido, en los últimos años, a un estilo de gestión que busca mejorar las acciones de adentro hacia afuera, a partir de las transformaciones de nuestro ser. Son competencias que tienen que ver con otras formas de gestión orientadas a observar, escuchar, preguntar, empoderar, acompañar y retroalimentar de manera productiva, en vez de vigilar, castigar o aconsejar. Este artículo tiene como propósito recoger la experiencia de los equipos deportivos ganadores, pero desde un espacio donde “aprender” signifique algo más que ser efectivo en una acción.