
Los coaches organizacionales sabemos que cuando hablamos de aprendizaje nos estamos refiriendo a incrementar la capacidad de acción no solo de un ser humano, sino, especialmente, de un colectivo. Pero cuando se habla de incrementar la capacidad de acción se hace referencia a aquellas acciones para las cuales no somos competentes, que nos desafían a salir de nuestra zona de comodidad. Además, no son acciones en solitario, sino acciones coordinadas entre diferentes actores del sistema empresarial y no únicamente entre el facilitador-coach y el aprendiz. El propósito de este artículo es mostrar la relevancia que tiene, para las organizaciones que aprenden, el trabajado coordinado y sinérgico entre los diferentes actores de la formación.